• Login
  • Autores
El Límite News - Periodismo
  • Inicio
  • Sociedad
    Lo único que me importa

    Lo único que me importa

    El accidente que dio origen a la tarjeta de crédito

    El accidente que dio origen a la tarjeta de crédito

    Qué los cumplas feliz, Charles Darwin

    Qué los cumplas feliz, Charles Darwin

    25 años del crimen de José Luis Cabezas

    25 años del crimen de José Luis Cabezas

    La mujer más hermosa de la República

    La mujer más hermosa de la República

    Escribir una carta, un método revolucionario

    Escribir una carta, un método revolucionario

    Guardar polvo: la resignificación de un símbolo a través de la nostalgia

    Guardar polvo: la resignificación de un símbolo a través de la nostalgia

  • Escritos
    Los juegos del mal

    Los juegos del mal

    Dejarse llevar es también elegir la libertad

    Dejarse llevar es también elegir la libertad

    Escribir una carta, un método revolucionario

    Escribir una carta, un método revolucionario

    Tradiciones olvidadas y una danza deconstruida

    Tradiciones olvidadas y una danza deconstruida

    No apaguen la luz

    No apaguen la luz

    Bajar al infierno por amor

    Bajar al infierno por amor

    ¿Con qué alimentás a tu algoritmo?

    ¿Con qué alimentás a tu algoritmo?

    El poder mágico de las palabras

    El poder mágico de las palabras

    Bomba erótica en la mochila: El día que conocí a Milo Manara

    Bomba erótica en la mochila: El día que conocí a Milo Manara

    Trending Tags

    • Sexo sin amor
    • Cartas de amor
  • Cultura
    Los secretos de la banda

    Los secretos de la banda

    La educación y el dilema de pagar el mínimo de la tarjeta de crédito

    La educación y el dilema de pagar el mínimo de la tarjeta de crédito

    Esas colecciones viejas

    Esas colecciones viejas

    El silencioso trabajo del corrector de textos

    El silencioso trabajo del corrector de textos

    Unidos por la palabra: Los beneficios de los talleres literarios

    Unidos por la palabra: Los beneficios de los talleres literarios

    “Primavera de libros”: se inauguró la Feria del Libro de La Matanza

    “Primavera de libros”: se inauguró la Feria del Libro de La Matanza

    Gloria Anzaldúa, una voz en las fronteras

    Gloria Anzaldúa, una voz en las fronteras

    Aprender a programar en la escuela

    Aprender a programar en la escuela

    ¿Por qué se celebra hoy el día de la música?

    ¿Por qué se celebra hoy el día de la música?

  • Política
  • Deportes
  • Espectáculos
  • Autores
No Result
View All Result
  • Inicio
  • Sociedad
    Lo único que me importa

    Lo único que me importa

    El accidente que dio origen a la tarjeta de crédito

    El accidente que dio origen a la tarjeta de crédito

    Qué los cumplas feliz, Charles Darwin

    Qué los cumplas feliz, Charles Darwin

    25 años del crimen de José Luis Cabezas

    25 años del crimen de José Luis Cabezas

    La mujer más hermosa de la República

    La mujer más hermosa de la República

    Escribir una carta, un método revolucionario

    Escribir una carta, un método revolucionario

    Guardar polvo: la resignificación de un símbolo a través de la nostalgia

    Guardar polvo: la resignificación de un símbolo a través de la nostalgia

  • Escritos
    Los juegos del mal

    Los juegos del mal

    Dejarse llevar es también elegir la libertad

    Dejarse llevar es también elegir la libertad

    Escribir una carta, un método revolucionario

    Escribir una carta, un método revolucionario

    Tradiciones olvidadas y una danza deconstruida

    Tradiciones olvidadas y una danza deconstruida

    No apaguen la luz

    No apaguen la luz

    Bajar al infierno por amor

    Bajar al infierno por amor

    ¿Con qué alimentás a tu algoritmo?

    ¿Con qué alimentás a tu algoritmo?

    El poder mágico de las palabras

    El poder mágico de las palabras

    Bomba erótica en la mochila: El día que conocí a Milo Manara

    Bomba erótica en la mochila: El día que conocí a Milo Manara

    Trending Tags

    • Sexo sin amor
    • Cartas de amor
  • Cultura
    Los secretos de la banda

    Los secretos de la banda

    La educación y el dilema de pagar el mínimo de la tarjeta de crédito

    La educación y el dilema de pagar el mínimo de la tarjeta de crédito

    Esas colecciones viejas

    Esas colecciones viejas

    El silencioso trabajo del corrector de textos

    El silencioso trabajo del corrector de textos

    Unidos por la palabra: Los beneficios de los talleres literarios

    Unidos por la palabra: Los beneficios de los talleres literarios

    “Primavera de libros”: se inauguró la Feria del Libro de La Matanza

    “Primavera de libros”: se inauguró la Feria del Libro de La Matanza

    Gloria Anzaldúa, una voz en las fronteras

    Gloria Anzaldúa, una voz en las fronteras

    Aprender a programar en la escuela

    Aprender a programar en la escuela

    ¿Por qué se celebra hoy el día de la música?

    ¿Por qué se celebra hoy el día de la música?

  • Política
  • Deportes
  • Espectáculos
  • Autores
No Result
View All Result
El Límite News - Periodismo
No Result
View All Result
Home Escritos

Cartas de Cristina a alguien. Carta 7: Herencia

María Cristina Heyazi by María Cristina Heyazi
24 mayo, 2021
in Escritos
0
Cartas de Cristina a alguien. Carta 7: Herencia
587
SHARES
3.3k
VIEWS
Share on FacebookShare on Twitter
Cuando alguien se va de este mundo, puede dejarte o no, algo llamado Herencia. En mi familia, por suerte, las herencias no son materiales precisamente.
Hoy, les voy a hablar de alguien muy especial en mi vida a parte de mis hijos y nieto, por supuesto.Voy a hablar de alguien que «heredé» de mi mamá Daría, de su hermana Mariana. Mi tía -madrina Mariana es un ser especial. Todos la conocen, y cuando la conocen, la aman.
Es distinta a mi madre, aunque ella se empeña en decir que son iguales y les aconsejo que no la contradigan porque es una causa perdida.
Ya les conté que mi abuelo materno, Jerónimo, español, murió cuando mi mamá tenía 2 años. en 1925. La abuela Modesta, prácticamente recién llegada de España, quedó totalmente sola en Villa Luro, con una hijita pequeña en su casa de Moliere que en aquellos tiempos era totalmente descampado. Por supuesto, tuvo que dejar de llorar al esposo muerto y salir a trabajar lavando y planchando en la casa de una familia adinerada de Flores, que era «super lejos» de Villa Luro, aunque les cueste creerlo. Salía con la nena de madrugada, calles de tierra, cruzaban el Arroyo Maldonado, y en Avda.Rivadavia tomaban el transporte para llegar a Flores. Lavaba a mano, después planchaba con cinco planchas de carbón, regresaban a la tardecita al hogar, para recomenzar al día siguiente. Como verán, no se sentó a esperar que Papá Estado las mantenga, de allí también aprendí el amor al trabajo (pero esto se los cuento otro día).
Esta rutina duró varios años hasta que un día la abuela (que era una chica de treinta y algo) conoció a un señor italiano llamado Antonio y se casó formando una nueva familia.De este matrimonio llegó a Moliere mi tía Mariana, cuando mi mamá tenía 11 años. Esa nena, esa hermanita, pasó a ser la «muñeca» de mi madre. Mami aprendió a coser y la vestía. Le hizo los primeros guardapolvos y todo lo que deseaba. Cuando mi mamá se casó, mi tía, que tenía 8 años, lloró tanto que mis padres tuvieron que irse antes de la pequeña fiestita familiar, por miedo a que se enfermara. Con 19 y 22 años, mis padres se convirtieron en «papás jóvenes» de mi tía. La llevaban con ellos a todos lados como si fuera su propia hija.
Tía Mariana es divertida por naturaleza. Generosa como pocos. Es alguien que cuando le preguntas: ¿Cómo estás? Siempre, siempre te va a decir «Bien» «Regio», Cero mala onda.
Debido a la diferencia de edad con mi mamá, fue una tía joven. Al nacer mi hermano tenía 10 años. Al nacer yo, 17. Más que una tía era una hermana mayor. Ella fue mi «cuenta cuentos»  desde que nací y especialmente desde que me enfermé. Cuando yo era chiquita me llevaba a su casa de Versalles donde aún vive y yo la seguía por la casa. Si iba al baño, yo me pasaba en la puerta y ella se reía. Una vez siguió caminando y llegó al lavadero y dándose vuelta de golpe, ató su ropa a la mía con broches. Fue muy divertido. Era capaz de cortar las manzanas en fetas transparentes y acomodarlas como abanico para que yo las comiera. En otra ocasión armó una fiesta para mis muñecas. En el fondo de su casa puso una mesa, hizo una torta chiquita en un molde de mi batería de cocina de juguete y apareció al rato disfrazada de cura con un jarro con agua y bautizó a los muñecos.
Cuando sus hijos eran chicos, tuvieron durante un tiempo, problemas económicos ya que su esposo perdió el empleo. Pero la tía no se deprimió. Como siempre y con buena onda hizo magia. Consiguió trabajo y el dinero alcanzó igual. Una vez  armó un festejo porque habían podido comprar un felpudo y un plumero. Aún hoy recuerdo la situación y me río. Podría llenar cuadernos con anécdotas de la tía Mariana. Ella no cambió nunca. Es buena madre, buena abuela, buena amiga. Cumple con todos. Es «regalera». Tiene un defecto, es compradora compulsiva. Pero es tan feliz cuando compra cosas y las reparte que da gusto verla. Todos la quieren. Todos la llaman TIA. Pero, hasta aquí llego. No se enoje, pero no la comparto. Fue y es mi única tía de sangre y mi madrina y soy su única sobrina. Hoy con 85 años sigue tan joven como siempre, por eso permítanme ser egoísta : NO LA COMPARTO CON NADIE. Ella es la HERENCIA más importante que me dejó mi madre: ¡SU AMADA HERMANA!
TIKI
Tags: CartasHerencia
Previous Post

Sin magia no importa el color

Next Post

Fiestas virtuales, la versión digital de la noche argentina

Next Post
Fiestas virtuales, la versión digital de la noche argentina

Fiestas virtuales, la versión digital de la noche argentina

Recomendados

No apaguen la luz

No apaguen la luz

10 septiembre, 2021
Salud mental y confinamiento

Salud mental y confinamiento

24 mayo, 2021

Categorías

  • Cultura
  • Deportes
  • Escritos
  • Espectáculos
  • Política
  • Salud
  • Sociedad
  • Tecnología
  • Tendencias
  • Turismo

No te pierdas...

Los secretos de la banda
Cultura

Los secretos de la banda

22 abril, 2025
Lo único que me importa
Sociedad

Lo único que me importa

2 abril, 2025
La educación y el dilema de pagar el mínimo de la tarjeta de crédito
Cultura

La educación y el dilema de pagar el mínimo de la tarjeta de crédito

5 octubre, 2024
Que conste en actas
Espectáculos

Que conste en actas

5 octubre, 2024
Esas colecciones viejas
Cultura

Esas colecciones viejas

17 agosto, 2024
Los juegos del mal
Escritos

Los juegos del mal

3 agosto, 2024
Facebook Twitter

Secciones

  • Cultura
  • Deportes
  • Escritos
  • Espectáculos
  • Política
  • Salud
  • Sociedad
  • Tecnología
  • Tendencias
  • Turismo

Selecciona temas por Etiquetas

Amor amor libre Aplicaciones Calavera Cartas Ciudades capitales dejarse llevar Denuvo Día de la independencia Educación pública Gamers Letras literatura miedo miedo al amor muerte México Música navidad Obesidad padres pandemia papa noel pasión Programación Queer Realaciones casuales Redacción Redes Relaciones fallidas resiliencia salud San Martín Secundario Sedentarismo Sendra Sexo Sexo sin amor Sexualidad Soledad soñar Tarot TikTok UBA urbanismo

© 2024 El Limite News - Periodismo de Opinion

Welcome Back!

Login to your account below

Forgotten Password?

Retrieve your password

Please enter your username or email address to reset your password.

Log In
No Result
View All Result
  • Home
  • Sociedad
  • Escritos
  • Cultura
  • Política
  • Espectáculos
  • Deportes
  • Autores
  • Log In

© 2024 El Limite News - Periodismo de Opinion

Este sitio utiliza cookies. Al utilizar este sitio estas dando tu consentimiento a las cookies que se utilizan. Vea nuestra Política de Privacidad y las Políticas de Cookie.