Amar siempre parece una buena idea. La mayoría de las personas transitan su vida en la búsqueda del AMOR, ese así con mayúsculas que te invade, te enamora, te dan ganas de formar una pareja y el… “vivieron felices para siempre”.
Sin embargo, estamos nosotros, los que padecemos filofobia; sí hoy además vamos a aprender una palabra nueva ¿Pero qué es la filofobia? Para resumir, es la imposibilidad o el miedo a enamorarse.
Generalmente, los que la hemos padecido, buscamos relaciones que por alguna razón jamás se nos permitiría enamorarnos.
A veces escucho a amigas que dicen “voy a conocer a alguien que me gusta. Ojalá salga todo bien” y depositan toda la expectativa en que esa persona pueda “engancharse” porque ellas ya lo están, incluso sin conocerse.
Ese miedo a enamorarse está muchas veces presente a nuestro alrededor, incluso más de lo que imaginamos.
Los estudios dicen que esta fobia pudo comenzar por una crianza carente de cariño; luego de alguna relación fallida, o cuando confiamos en quienes decían amarnos y no era así.
Lo cierto es que esta problemática existe y la situación se pone difícil cuando alguna persona insiste a pesar de nuestro intento de escape. Ahí probablemente y contra nuestra voluntad, nos cambie la suerte y de a poco se nos vaya el temor a enamorarnos. Claro que cada desencuentro es un retroceso bastante marcardo.

































